Primero, debes saber que como empleado tienes derechos en cuanto a la vuelta al trabajo, también debes conocer la política de reincorporación al trabajo si sufres una lesión o desarrollas una enfermedad.

Tu empresa tiene la obligación legal de tratar a todos los trabajadores por igual, y de realizar ajustes razonables para las personas con discapacidades, enfermedades, lesiones, etc. Esto significa que los empresarios tienen que tomar las medidas adecuadas para que una persona con discapacidad pueda acceder al empleo y participar en él.

Los que se reincorporan al trabajo después de más de siete días de baja pueden recibir una nota de salud individual apropiada si su salud afecta a su capacidad de trabajo. Esta nota ayudará a identificar y delegar las tareas que se pueden realizar en el puesto de trabajo específico.

Debes desarrollar una política de reincorporación al trabajo integrada en la empresa, basada en la seguridad y la salud; la gestión de las ausencias por enfermedad y las políticas de discapacidad.

La política puede establecer detalles relativos, por ejemplo, a las funciones y responsabilidades de los agentes implicados, los procedimientos relativos a los acuerdos de comunicación con el empleado y las medidas de adaptación del lugar de trabajo.

Las probabilidades de volver al trabajo con éxito son mucho mayores cuando se toman medidas al principio del periodo de ausencia. La atención debe centrarse en adaptar los problemas de salud de los empleados para que puedan volver al trabajo lo antes posible.

Informar de una lesión, incidente o enfermedad a la aseguradora lo antes posible, hará más probable que el trabajador vuelva a trabajar más pronto.

También debes ofrecer apoyo; es importante recordar que el empleado tendrá también una lista creciente de preocupaciones, y es bueno dar un estímulo positivo y comprensión de la situación en todo el proceso, ayudando al trabajador a sentirse apoyado. Mantener sus necesidades, y poner algunas respuestas en acción.

En cuanto a la comunicación, debes garantizar una comunicación regular.

Esto incluye:

• Llamadas o emails con regularidad
• Mantenerlos informados de lo que pasa en el trabajo
• Acordar los detalles de lo que debe compartirse en la empresa y lo que debe ser confidencial

La comunicación debe mantenerse mientras los empleados estén de baja y en el proceso de volver al trabajo, y esto es crucial para obtener una respuesta positiva y la voluntad de los empleados de volver al trabajo tan pronto como sea posible. Al igual que con el apoyo, la comunicación reafirma al empleado que es valorado y apreciado.

Aunque la comunicación incluye a varias personas, desde el trabajador, empresario, asesor sanitario, hasta el médico, la aseguradora y el instituto de formación, y a pesar de tener diferentes responsabilidades en el proceso, todos deben compartir el objetivo común de una reincorporación rápida y eficaz .

Debes implicar al trabajador en el plan de reincorporación al puesto. El empleado debe tener voz en el objetivo del plan, que debe centrarse en las capacidades actuales, los descansos y las horas de trabajo.

Las medidas de reinserción del trabajador deben estar adaptadas a sus necesidades y capacidades, en lugar de ser de “talla única”. Reducción de horarios, puestos de trabajo adaptados, ajuste de las exigencias del trabajo, todo ello debe diseñarse en función de lo que la persona pueda hacer.

Aunque la capacidad de trabajo puede haber cambiado, es más últil mantener el enfoque en las habilidades y capacidades restantes de la persona, y rediseñar su papel en torno a ello.

El propósito de las tareas alternativas es que el empleado pueda recuperarse en el trabajo, no solo ahorrando dinero en tiempo y eficiencia perdidos, sino también asegurando que el empleado está mejorando sus capacidades funcionales a través del movimiento y manteniendo una salud mental positiva.

Las intervenciones deben tener en cuenta el panorama general. Deben tenerse en cuenta desde las condiciones del lugar de trabajo hasta los factores sociales y personales (p.ej., la carga de viajes asociada a los tratamientos, el nivel de cooperación entre los compañeros de trabajo, etc).

También debería tenerse en cuenta la preparación de otros empleados para la reincorporación de los mismos. La ansiedad y los nervios son comunes en los empleados que han estado de baja durante algún tiempo. Es importante hacer que el trabajador esté bien apoyado, asegurando la concienciación del regreso del empleado entre el resto del personal, también acerca de los cambios en su papel, por lo que todo el mundo pueda ofrecer ánimo y apoyo cuando sea posible.